En esta nota conoceremos el collar de macarrones de oro de Kraft para celebrar el día de las madres y evocar la nostalgia. Kraft Mac & Cheese uno de los platos típicos de Estados Unidos que además de despertar la nostalgia ahora será parte de la Joyería de Lujo. Un homenaje que evoca los recuerdos de infancia. Gracias a un diseño elegante y mítico que recuerda el gesto de amor al compartir un plato de Kraft Mac & Cheese. El proyecto ha sido realizado en colaboración con la famosa firma de alta joyería Ring Concierge, crearon una pieza única, sofisticada y que evoca la ternura y agrega un poco de humor. Es ese collar de macarrón en oro macizo de 14 quilates, recordando las manualidades infantiles que creaban los niños en su infancia a través de muchas generaciones.
Una propuesta que nos recuerda nuestros primeros años en el jardín de infancia o en el parvulario cuando realizábamos manualidades con cartulina y pasta seca. Pero esta vez el elemento ha sido elevado hacia la joyería de alta gama. Esto nos hace recordar como un elemento tan simple como la forma de un macarrón puede evocar el amor de un hijo hacia a su madre y el diseño de lujo que da vida a un objeto de culto.
El collar de macarrones de oro de Kraft de 14 kilates para celebrar el día de la madre
El collar es de edición limitada y ha sido diseñada de forma pulcra y elegante. En forma de un tradicional fideo de macarrón sólido ha sido pulido y colocado en una cadena de oro de 40 centímetros. Estos elementos se han colocado en una clásica de color azul de Kraft, evocando la nostalgia para reforzar la idea. Un empaque que recuerda nuestra infancia pero proporciona un contraste visual entre lo cotidiano y exquisito.
“El poder del diseño reside en su capacidad para contar historias con objetos”, decía Sir Terence Conran, uno de los pioneros del diseño británico. Este nuevo collar es más que un accesorio, su narrativa se extiende a través de muchas generaciones.
Joyería accesible pero exclusiva: collar de macarrones de oro
Un producto de oro de 14k, el collar Forever Macaroni se vende por apenas $25, esto hace que el mensaje se sienta mucho más genuino. Ya que aunque sea un producto de lujo, está al alcance de mucha gente. Fue lanzando el 1 de mayo con una producción limitada, sin lugar a dudas será un objeto de colección muy preciado entre los coleccionistas.
Además cada compra incluye una caja de Kraft Mac & Cheese, para fortalecer el concepto y honrar a nuestra madre. También para recordar aquellos momentos familiares. Una propuesta de marketing que nos toca la nostalgia.
Una estrategia de marca que mezcla ternura y sofisticación
Es una campaña que va más allá del branding tradicional, apela a la nostalgia gracias a revivir un recuerdo. Un insight que nos hace recordar esos símbolos culturales pero con un toque moderno. Kraft captura los recuerdos y los viste de gala, una memoria.
Nicole Wegman, fundadora y directora ejecutiva de Ring Concierge, comentó: «Hay algo realmente hermoso en convertir un ritual de la infancia en una joya auténtica. Como madre y amante de los macarrones Kraft, esta colaboración es personal y significativa para mí».
Detalles del concepto del producto y su vínculo con la marca Kraft
A nivel de diseño gráfico y el posicionamiento de marca, se logran varios objetivos para Kraft:
Se refuerza su identidad: vemos el tradicional empaque en azul de Kraft esto le da una coherencia visual y hace que los consumidores reconozcan a la marca al instante.
Una conexión emocional: el revivir los recuerdos de infancia y como le regalábamos nuestras artesanías a nuestras madres. Una relación que perdura a través de muchas generaciones.
Se reinterpreta un objeto cotidiano: un simple macarrón se convierte en una pieza de joyería, lo trivial y cotidiano adquiere un poder y sensibilidad.
Este producto ha sido centrado en sus clientes: es bonito, asequible y funcional, un regalo que emocionará a los clientes.
Pensamientos finales sobre la nueva campaña de Kraft Mac & Cheese
Sin lugar a dudas esta alianza entre Kraft Mac & Cheese y Ring Concierge es muy particular y un claro ejemplo de branding emocional. Lo cotidiano y simple se revaloriza con un objeto que nos hace recordar muchos buenos momentos con nuestras madres.
Un posicionamiento emocional de la marca de alimentos. Se logra un balance entre la cultura popular y la joyería artesanal. El collar que no sólo cuelga del cuello, también es uno de los ejemplos más puros de los niños y su mamá.